La Fuenseca, la taberna, es sin lugar a duda un referente para todos los cordobeses. Este templo del arte en su más amplia denominación cumple estos días, 169 años. Un poco más joven, que la ubicación definitiva de la fuente de la que coge nombre, es para muchos el recuerdo vivo de una Córdoba de gentes, de una Córdoba social, de una Córdoba de flamenco y artistas. En definitiva, la Córdoba que no se quiere perder.
Esta taberna, hoy, como no podía ser de otra manera, está coordinada, por un artista como Jesús Alamillos. Está coordinada, aunque también el es el propietario, porque este es un local democrático y delegado, muy delegado.
Jesús y los fuensequeños, que así gustan de llamarse los habituales de la casa, son lo que llevan adelante una ingente cantidad de eventos culturales y sociales. Distintas delegaciones de exposiciones, o de revista, o de otros, etc. son llevadas por parroquianos bajo la coordinación de Alamillos.
Él define su casa, la casa de todos, como “un espacio cultural donde se reúnen grandes artistas de la pintura, escultura, guitarristas, flamencos. Todo el mundo del flamenco se reúne aquí. A parte, se reúnen un par de comparsas, tres coros rocieros”.
La taberna nace alrededor de 1850, siendo ya casa cultural. Este templo del buen vino y de la buena charla era visitado por personajes emblemáticos de Córdoba. Junto a otros, Julio Romero de Torres que era uno de esos fuensequeños de la época.
“Siempre estaba en discusión con Mateo Inurria. Había dos tabernas, una enfrente de otra, se gritaban de puerta a puerta”.
La taberna, por su apertura cultural, también acogió a grupos de homosexuales que no tenían donde encontrarse.
Jesús, su familia, es propietaria desde 1989. Allí, el abuelo, fundó la Peña Merengue de Córdoba, amigo personal, y creó junto a Pepe Capdevila, crearon la Peña Rincón de los Artistas y les da una sede en la ciudad donde reunirse y conversar.
Bartolomé Lebrón y Manuel Martín, ellos, que ya llevaban la gestión de exposiciones con su abuelo, continúan con la misma labor hoy en día.
Esta taberna podemos decir que “es la taberna más antigua de Córdoba. Mantiene su estructura y mantiene, incluso, la barra. Esta barra tiene 169 años”. Sólo se ha cambiado la parte del mostrador, la parte de arriba, ya que hoy en día no se usa la tiza para apuntar.
La taberna es un claro espacio de artistas, de flamencos, un espacio de arte y cultura.
La celebración de este aniversario estará capitaneada, como artista, por uno de los grandes. José Manuel Belmonte presenta parte de su obra para que todos puedan disfrutar de ellas. “El Cuerpo del Pecado” es el nombre de esta muestra que se realiza con motivo de este 169 cumpleaños.
El artista que se encuentra en plena vorágine de exposiciones tanto en China, como en Madrid, siendo un fuesequeño de corazón y alma, no podía dejar pasar este momento para compartirlo con todos.