Se ha acabado la liga, los padres y madres pueden descansar.

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Lorenzo Jurado Ruiz, máximo goleador de Villafranca, ha disputado una treintena de partidos en Benjamín.
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Mucho se habla entre los futboleros y futboleras de que si Messi o Ronaldo, que si Sevilla o Betis, que si el Córdoba sube o baja. Esas son las conversaciones habituales de los lunes en la mañana. Compartimos ese café con amigos y conocidos dando nuestra opinión sobre tácticas y entrenamientos, direcciones deportivas o presidencias. Pero muchos se olvidan de abajo.

También para los pequeños ha llegado el final de la liga, un ejemplo es el Benjamín del Villafranca de Córdoba. Estos pequeños juegan en el Grupo I de la Tercera Andaluza de Córdoba.

Diecisiete equipos de distintas partes de la provincia componen una categoría, donde este equipo, ha reinado y sacado una diferencia de 8 puntos a sus seguidores.

Los padres y madres de estos deportistas, pequeños grandes futbolistas, han tenido que recorrer gran parte de la provincia para llevar a sus hijos a practicar este deporte. Ir desde Palma del Río a Villa del Río o desde Córdoba a Baena, es un esfuerzo que pocos valoran que hacen estos preocupados progenitores.

El Messi, el Ronaldo, de este equipo es Lorenzo Jurado Ruiz. El, a su corta edad, ha tirado del equipo para conseguir que sea el digno ganador de esta competición y conseguir que este humilde equipo, en comparación con otros importantes equipos de la provincia, pueda ascender.

Este equipo Benjamín ha sido el único que ha conseguido triunfar, quedar primero en su categoría, y con ello el ascenso, de todos los de este municipio del Alto Guadalquivir. El año que viene estos padres y estas madres tendrán que seguir haciendo el esfuerzo en tiempo y, por supuesto, en dinero para cumplir con el deseo y la ilusión de su hijo.

Al igual que han hecho los progenitores de Lorenzo que además cuenta con la inestimable colaboración, su equipo, del padre del jugador como Patrocinador de este equipo a través de Bar Caracoles de Villafranca que ha sido paseado por todos los municipios que ha visitado un equipo.

Aunque la inversión económica para este humilde bar que se encuentra en el CIE de Villafranca, es muy importante, está claro que “la cara de satisfacción de mi hijo no tiene precio”, son las palabras de Rafael un padre orgulloso al igual que el resto de todos los padres y madres de Villafranca, Córdoba, Andalucía, … que apoyan a sus hijos e hijas en el desarrollo de actividades deportivas.

Enhorabuena campeones.