Pepe González Arenas: "necesitamos un pueblo con más cultura. Cultura artística, cultura científica o incluso cultura industrial. Porque un pueblo con cultura es un pueblo más libre”

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Entrevistamos al nuevo Secretario Provincial de Cultura del PSOE en Córdoba.


Desde hace algún tiempo nuestro medio se ha dirigido a los cargos responsables culturales de las diversas instituciones y partidos políticos para que nos hablaran sobre sus propuestas o ideas. Hasta ahora no hemos tenido suerte. Hoy el nuevo responsable de cultura, en el ámbito provincial de Córdoba, si se ha puesto a hablar con nosotros. Pepe González Arenas en esta primera entrevista nos habla sobre él y con las ideas que ha llegado a este cargo. Proximamente, en otra entrega, nos hablará sobre ideas y propuestas de su partido para Córdoba y su provincia.

pepe

Comencemos por el inicio. Usted fue elegido secretario de cultura en el congreso provincial del PSOE. En los ambientes culturales ha llamado mucho la atención. Explíqueme la razón.

Efectivamente, el pasado 18 de diciembre, en Baena, celebramos el 15º Congreso Provincial del PSOE de Córdoba y allí, las compañeros y compañeros ratificaron la lista presentada, con casi un 93% de los votos. Es un respaldo que nunca antes ha tenido una Comisión Ejecutiva Provincial. Y eso no es lo único importante. Quiero destacar que es la primera vez que al frente se encuentra una mujer, mi compañera y amiga, Rafi Crespín. Eso ya es un logro, porque demuestra cuánto ha cambiado la Organización. Mire, yo milito en el PSOE desde 1985, es decir hace la friolera de 36 años y jamás, nunca, ha habido una Ejecutiva como esta. Una Ejecutiva de la unidad, donde una parte del Partido no se ha impuesto sobre otra. Voy a decirle más: esta es una Ejecutiva potente, porque está formada por gente muy preparada y con ganas. Son compañeras y compañeros míos que no van de postureo. Que asumen esta responsabilidad para arrimar el hombro. No es para salir en las fotos, es para remangarse y ponerse a trabajar, porque hay mucho tajo por hacer. Es cierto que en los ambientes culturales cordobeses ha llamado la atención y quiero creer que de manera positiva. Quien me conoce sabe que me tomo las cosas en serio, muy en serio, que yo no pierdo el tiempo, que soy una persona leal y que me entrego totalmente en cada cosa que hago.

Hablando de la ejecutiva. Usted tal vez sea quien accede a ella con más años en el DNI. ¿Afectará eso de alguna manera?

Mire, la Comisión Ejecutiva Provincial es un órgano joven. Su media de edad son 43 años. Yo soy uno de sus componentes que más años aporta. Y así se lo dije a mis compañeras y compañeros en la primera reunión de la Ejecutiva: “vengo cargado de años, pero también de actividad. Quienes no me conocéis, ya entenderéis lo que digo. Soy muy activo y lo comprobaréis pronto”. Yo creo que ser uno de los miembros mayores, me permite aportar algo muy valioso: la experiencia. La juventud suele tener un punto de arrogancia. Yo lo fui. Con menos de 30 años fui el secretario general de la agrupación local Centro del PSOE de Córdoba y en 1991, el alto cargo más joven de la Junta de Andalucía. Ahora vengo con la serenidad que te dan los años. Eso no es ninguna tara. Quien me conoce, sabe de mi ritmo frenético de trabajo. Como decía antes: hay mucho tajo para trabajar y yo no sirvo para ver las nubes pasar.

¿Por qué fue usted elegido para la Secretaría de Cultura?

Bueno esa pregunta tal vez debería hacérsela a mi flamante secretaria general Rafi Crespín, pero intentaré responder por cortesía.
Yo estoy en la secretaría de cultura porque me lo ofreció mi amiga Rafi Crespín. Si me lo hubiera propuesto otra persona, no sé cual habría sido mi respuesta. Con Rafi tuvo que ser sí o sí. Porque Rafi es una persona dinámica, joven y altamente cualificada. Que tiene la experiencia que aporta dirigir un ayuntamiento o representar a un gobierno autonómico. Y ahora el trabajo parlamentario que realiza es tan bueno, que en el último Congreso Federal fue elegida secretaria del Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso de los Diputados.
Cuando miras la televisión, y ves que detrás del presidente Sánchez, aparece una persona de Córdoba es un orgullo y que sea una mujer, hace que el orgullo sea doble.
No sé lo que Rafi vió en mí para proponerme esa secretaría. Supongo que pesó la parte de mi perfil dedicado al Arte, a la Cultura. Imagino que influyó el trabajo que desarrollé hace unos meses, en el “Equipo Impulso”, reuniéndome con colectivos culturales y practicando lo que llamamos “escucha activa”. Yo presumo de formar parte de la Ejecutiva que lidera Rafi Crespín. Creo que es un Equipazo con una sabia dirección.

Hablando de perfiles. El suyo es más bien científico.

Si y no. Como expliqué a mis compañeras y compañeros de la Ejecutiva, una parte de mi perfil es científico, porque trabajo como científico en el IFAPA de la Junta de Andalucía desde hace 26 años. Y durante 12 años he dirigido la Unidad de Cultura Científica. Desde esa Unidad, que en realidad era sólo una única persona, yo, se organizaba toda la divulgación científica de los 18 Centros que tiene el IFAPA repartidos por Andalucía. Un trabajo ilusionante pero muy intenso. Mire, le pongo un ejemplo. Durante el mes de noviembre se celebra la Semana de la Ciencia y las diferentes instituciones científicas organizan actividades divulgativas. Bueno, pues desde la Unidad de Cultura Científica del IFAPA hemos logrado organizar y desarrollar satisfactoriamente más actos que las 10 universidades públicas andaluzas juntas. Yo acostumbro a decir una frase: “necesitamos un pueblo con más cultura. Cultura artística, cultura científica o incluso cultura industrial. Porque un pueblo con cultura es un pueblo más libre”.
Así que como ve, cuando trabajo en el IFAPA, también estoy trabajado en cultura. Al margen de eso tengo una intensa actividad como artista, como fotógrafo, de la que, si quiere, luego podemos hablar.

¿Cómo ve el panorama cultural cordobés?

Esta pregunta es compleja de responder porque hay que abordarla desde diversas ópticas.
Desde el punto de vista de las instituciones hay mucho por hacer. Considero que desde la Diputación se está haciendo mucho y bueno por impulsar la Cultura hasta en el pueblo más pequeño. En eso se tiene que notar nuestra ideología socialista. Otras instituciones se dedican a crear grandes edificios culturales para captar cruceristas rusos.
El ayuntamiento de Córdoba, en materia cultural, está desnortado, errático, donde tiene una concejala de cultura que parece que está abducida por los funcionarios de su área. Desaprovechando oportunidades.
Le pongo un ejemplo: una antigua reivindicación de las mujeres y los hombres que nos dedicamos a la fotografía era disponer de un Centro Nacional de Fotografía. En la Unión Europea, todos los países tienen uno, salvo España, Chipre, Malta y Rumanía, a pesar del importante papel que ha tenido la fotografía en la historia del arte de nuestro país. Hace un mes el presidente Sánchez anunció la creación del Centro Nacional de Fotografía, que se ubicará en Soria. Y yo me alegro doblemente: porque vamos a tener por fín, el Centro deseado y porque al ser en Soria contribuimos a la lucha contra el despoblamiento institucional de la periferia, pero me hubiese gustado que hubiese sonado el nombre de Córdoba. Y eso no por espíritu chauvinista. Pocas ciudades son una potencia fotográfica como Córdoba. Con una asociación fuerte, como AFOCO, con un enorme número de fotógrafas y fotógrafos, con el Premio Mezquita de Fotografía, con el Premio Pilar Citoler, con la excelente fototeca del Archivo Municipal de Córdoba, etc. No digo que Córdoba tenía que haber sido la elegida. Pero sí que al menos debía haberlo intentado. Eso es sólo un ejemplo de la falta del interés por la cultura del alcalde Bellido.
¿Y de la Junta para que vamos a hablar? Ese C3A ajeno a Córdoba, dependiendo del CAAC de Sevilla, con una programación elitista, sólo para un puñado de artistas que curiosamente copan la mayoría de las subvenciones…Lo de la Junta en Córdoba, en materia de cultura duele. Y duele mucho.

Confirmo lo que dice. Hace unos años presentamos un ambicioso programa cultural dedicado al flamenco y la respuesta del funcionario, el señor limia, ahora director general de cultura del ayuntamiento de córdoba, fue decir que “en córdoba ya hay demasiado flamenco”. Así que tiene una amplia tarea por delante. ¿Ha comenzado ya a trabajar en la secretaría de cultura?

Fuimos elegido el día 18 de diciembre, sábado. El domingo ya había contactado con mi compañera Auria Expósito para empezar el trabajo. Y el lunes, cuando todavía no había transcurrido ni 48 horas de la elección, ya me reunía en la sede de la avenida del Aeropuerto, con el resto de la Ejecutiva Provincial. Ahora estoy contactando con las compañeras y compañeros que trabajan por la cultura en las distintas instituciones. Estamos elaborando el plan de trabajo. Tenemos una amplia tarea para vencer la inactividad cultural de la Derecha, que además de no hacer, pretende evitar que se conozca lo que hacemos otros.
Le pongo un ejemplo: en el año 2022 la cifra global, de 1.589 millones de euros que el Gobierno de España destinará a políticas de Cultura supone un incremento del 38,4% respecto a las de este año y es el presupuesto más elevado de la serie histórica. Esta cifra recoge 364 millones de euros de los fondos europeos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, que se distribuirán a las Comunidades Autónomas para que lleven a cabo políticas destinadas a la promoción de la Cultura. Aun sin contar con esta inversión de los fondos europeos, el Presupuesto para el año 2022 en Cultura es el más elevado desde el año 2009. Bueno pues la Derecha se ha encargado de que esa gran noticia pase desapercibida.

Una última cuestión ¿cree que su actividad como artista se verá de alguna manera influida por esta responsabilidad política?

Estoy seguro de ello. Como ciudadano y artista tengo el derecho a poder presentarme a cualquier convocatoria de ayudas y subvenciones. Eso es lo legal. Pero no lo voy a hacer. Porque para mí hay otra cuestión, que hay contemplar: la ética. No me parece ético que el representante cultural del Partido Socialista en Córdoba solicite una ayuda o una subvención cultural a una institución gobernada por socialistas. Es legal, pero yo ni siquiera me lo planteo. Quienes militamos en el Partido Socialista tenemos un plus de exigencia. No sólo se trata de cumplir la legalidad vigente. Se trata de incluir la moral y la ética en cada uno de nuestros actos.